Distheguy: Un homenaje a los sueños y la ambición medida en madurez emocional
La idea de crecer a veces da miedo, y más cuando uno es joven e inexperto. De niños, todo se nos hace fácil y creemos en muchas cosas que finalmente no logran concretarse. «Sueños» le llamamos en esos entonces, pero ahora, viéndolos con una mirada más fría -realista-, nos damos cuenta que a veces eran guajiros e inalcanzables.
Sin embargo, la nostalgia por esos pensamiento sigue, y se mantiene. Esto es lo que mantiene vivo a Distheguy, el alter ego artístico de Alex Martínez, un joven acapulqueño que llevó esta idea al plano musical.
Indumentaria natural
Desde el nombre del proyecto, se nota que Alex no busca más que hacerse un espacio en la escena mexicana sin ninguna parafernalia pretenciosa. Todo natural, como él mismo: «Terminando secundaria, empezando la prepa, el nombre de ‘Distheguy’ fue mi user de redes sociales. Mucha gente de mi círculo y de allá de Acapulco me conocía así. No tiene un significado profundo como tal».
Y esto genera un estatus de comodidad con el proyecto, al ser de una naturaleza más orgánica y lejos de prejuicios a la hora de empezar un proyecto artístico: «No fue un nombre pensado de manera artística, aparte no quería llamarme ‘Alex Martínez’, ¿sabes? Así se fue dando. Nunca pensé darle un sentido rebuscado y así es como se quedó, y me gusta así, porque de esta manera de conocen mis amigos y demás gente a la que vaya llegando con mi música».
Surgimiento de idealismos
El amor por el arte surge a una temprana edad para Alex; cuenta que desde muy niño mostraba la afición por los sonidos y la creación musical: «A lo largo de mi infancia me llamó la atención la moda y los sneakers. Todo esto terminaba relacionándose con la música, porque todo es arte».
Ya con todas estas influencias, decidió dar el paso: «Tenía rato queriendo venirme a vivir a la CDMX, y hasta hace poco concreté eso. De hecho aquí aprendí a todo lo que conlleva hacer una canción; desde la parte de ingeniería, hasta la distribución».
Obviamente al dar el paso de la profesionalización del proyecto, Distheguy conoció la profesionalización de los procesos mismos para llegar hasta donde, sin quererlo, ha llegado: «He conocido muchas personas y amigos con los que hemos crecido juntos desde hace apenas dos años»:
Un homenaje a los sueños
Desde este punto de la plática, noté que Distheguy es un ser cambiante. Un proyecto tangible que resurge a base de las delusiones humanes y nuestra maduración como personas; desde la profesionalización de la que habla Alex hasta la misma lírica, pero de eso hablaremos más adelante.
A lo que voy es que Alex me cuenta que Distheguy, en su corta carrera, ha tenido distintas etapas creativas: «Desde el último EP hasta este próximo que lanzaré, Teenage Dreams (2022), hay una diferencia sonora, más pop diría yo, más pop-punk y hasta con house y funk».
«Aunque también le añadí tintes de urbano en su momento», comenta Distheguy, «en aquel entonces, cuando recién empecé hacía más cosas relacionadas al R&B o el trap. Todo tiene su tiempo dentro del proyecto, por lo que no quisiera mantener un sonido estático durante toda la vida artística que dure Distheguy».
Y ya que me mencionó el próximo EP, no pude notar que Alex traía puesta una playera del trabajo: «Esta fue de la primera merch que lancé, la hice yo, es el tracklist del proyecto». La playera es blanca con un corte minimalista y sencilla, representando de fiel manera la calidez del proyecto.
El próximo EP de Distheguy cuenta ya con dos sencillos lanzados, pero a palabras de Alex, «Teenage Dreams (2022) sale tentativamente en noviembre». La idea va tomando forma poco a poco, gestionando cada sencillo para finalmente lanzarlo como proyecto. Pero lo interesante viene en la conceptualización del EP:
«El nombre viene de rendirle homenaje a esos sueños que creamos en la adolescencia. Pasa mucho que creces teniendo aspiraciones y deseos a cosas artística, y con el tiempo se van esfumando por la llegada al mundo real», comenta Alex. «Terminas haciendo otras cosas por la necesidad de crearte una imagen y una vida en el mundo real, o lo que creemos que es el mundo real».
Teenage Dreams (2022) busca mantener viva la llama de la ansiedad juvenil por conocer y comerse al mundo, un intento fiel de homenajear a los sueños que teníamos de niños, cuyos objetivos podemos cumplir ahora con los recursos, el tiempo y la madurez que tenemos de adultos.
«A lo largo del proyecto va a cambiar, pero justo ahora es hablar de esa parte tan pura del niño convirtiéndose en adulto», comenta Alex. Una fiel representación de la ambición: «Al final de cuentas no es un solo género, es una combinación de géneros e ideas a las que estuve influenciado esta etapa de mi vida. A ver qué otras cosas e influencias llegan después».