19. Reseña de Amor en Español (2022) de Jesse Báez
Me gusta de cierta manera pensar que actualmente la música se encuentra en un estado de fusión, donde lo aclamado por la crítica y el público es proporcional a la cantidad de géneros que un artista toque en sus recientes canciones, y a veces hasta es considerado un genio por usar estilos completamente ajenos a su sonido característico o principal.
Ya hemos visto estos rasgos -en el mainstream- en C. Tangana, Rosalía, Bad Bunny, y muchos otros artistas. Esto hablando en el ámbito latino. En el anglo es similar, y los géneros son interminables y muy variados. Podremos tocar hasta un tema de «apropiación cultural» si tú quieres, pero sería divagar mucho en algo que no tiene cabida.
A lo que quiero llegar con todo esto es que estamos viviendo en una época artística donde toda fusión es alabada hasta los cielos, o al menos así lo veo yo, y que todo género que respete las reglas canónicas es otro lanzamiento más. Y en ocasiones podría estar de acuerdo, pero en otras no; acá me pasó esta discusión intrapersonal, con el Amor en Español (2022) de Jesse Báez.
Motown, R&B y soul
Creo que el éxito de Jesse Báez radica directamente en que sus raíces se han mantenido intactas, con algo de experimentación, claro está, pero nada fuera del molde. Y todo esto bien hecho. Con la conjugación del R&B y elementos del rock alternativo -para no usar el peyorativo «indie»-, Jesse se ha convertido en uno de los nombres más importantes del género en habla hispana.
Puedo entonces definir a Jesse Báez como uno de los artistas más prolíferos del R&B latino e hispano, con claras referencias al motown -no solo por su peinado- y un uso hermosísimo del soul, además de elementos del urbano contemporáneo, llámense rítmicas de reggaetón y hip hop.
Para mí el R&B, o al menos el que ha estado sonando en nuestro idioma, con la ñ, implica cierto sentimentalismo. Y amor. Amor de cualquier tipo. O su contraparte: Desamor, pero vamos hacia el mismo lugar. Lo digo desde el lado instrumental de las canciones; basta con escuchar al mismo Jesse, Girl Ultra, Kiddie Gang o Fntxy.
Entonces Amor en Español (2022) da a relucir estos detalles sonoros. Realmente todo el disco crea paisajes sonoros gracias a la producción minimalista y sutil de las manos de MLKMN, Yoshi y demás. Es extraño pensar que este podría considerarse un disco debut teniendo en cuenta los años de carrera de Jesse. B.A.E.Z (2016) y Turbo (2018) aparecen como tal, pero ninguno pasa de las ocho canciones.
Acá son once los tracks que componen al disco, y más que la duración del trabajo, Amor en Español (2022) es muy consistente, cada canción concuerda con la anterior y la siguiente. Es la magia de un álbum: Coherencia sonora o argumental. Ambas respetadas en este disco.
Amor con ñ
Las voces tenues de Jesse Báez en este disco resuenan de maravilla con estas cargas emotivas del enamoramiento. Un buen amigo me dijo que el amor se muestra en todo, el afecto y el gusto por ciertas cosas, no solo personas. Todo es amor, o desamor, pero es el mismo discurso presente a lo largo de las once canciones del Amor en Español (2022).
Jesse ha dicho que este trabajo lo preparó desde hace tres años, previo a la pandemia. Increíble entonces ver cómo ha evolucionado -aunque sea un poco- la manera de compartir el amor con el contexto pandémico.
Además de eso, la importancia de la Ñ en el español es la clave para comprender el argumento central del disco. Como tal, y a palabras del autor, es una antología de relatos que ha vivido o presenciado donde el amor es el principal detonante de la narrativa.
Entonces, la Ñ simboliza que es en idioma español, sí, pero también resalta que Amor en Español (2022) estará enfocado en ser volátil y comprensible para todos los que hablamos este lenguaje. En otras palabras, el disco busca, a través del idioma, relatar historias de amor que sean adaptables para todo público. Y esto para mí lo convierte automáticamente en un álbum genuino y sin pretensiones.
Amor en Español (2022) es un disco personal pero lejos de las limitaciones que sugiere el propio término, porque una vez que lo abracemos se vuelve parte de nosotros. Un disco cuyas canciones están hechas para mandarlas en los grupos de WhatsApp de nuestros amigos y decir «wey, soy» o «wey, tú». O bien para escucharlas e incentivar la autorreflexión de estos mismo temarios en cuestiones personales.
Mensajes adaptables, amor atemporal y fácil de comprensión en rítmicas R&B exquisitas al oído, como debe ser un buen R&B, como debe ser un buen disco en español que hable de amor.