Desde el año pasado, el festival Día Libre se convirtió en una propuesta de revivir la nostalgia y el punk rock en el norte del país. Y como bien hace honor a su nombre, la edición de Día Libre 2025 nos regaló un día libre en donde todos lxs 90s kids nos olvidamos del estrés de la vida diaria para vivir un día lleno de emociones. Porque la música no solo se escucha, se siente. Y a eso me refiero con nostalgia.
Una cultura palpable
Esta edición transmitió totalmente la esencia de lo que eran los festivales de punk rock a inicios de los 2000’s: moshpits, crowdsurfings e incluso las bandas interactuando con sus fans entre el público después de sus shows.
El festival se sintió muy único y personal y a pesar de la alta temperatura, la energía y emoción de los asistentes no dejó de estar presente. Incluso la mayoría ha catalogado a este festival como el Warped Tour Mexicano. La verdad es que nunca creímos que íbamos a poder ver a todas estas bandas reunidas en Monterrey en pleno 2025.
La organización, planeación con dos escenarios y la puntualidad de cada una de las bandas, fue muy valorado y agradecido. A pesar de que cada una de las bandas tuvo un tiempo corto para sus shows, no hubo retrasos.
Cada artista salió a la hora anunciada y al haber dos escenarios, permitió que ninguna banda se empalmara y se pudieran disfrutar todos los shows sin problemas y se mantuviera de inicio a fin la energía de los asistentes.

Coctel energético
Desde que se anunció la segunda edición del Día Libre 2025, había muchísima expectativa de qué bandas serían las que protagonizarían el festival y la sorpresa fue que Face to Face serían los headliners.
Aunque la banda había venido en años anteriores y su última visita fue en noviembre en Ciudad de México, fue su primera vez en Monterrey, lo que seguramente va a marcar un antes y un después de este tipo de festivales en el norte del país.

El evento estuvo lleno de bandas que se formaron desde el 2003 y que han sido parte de toda una generación que revolucionaron el género punk, el post hardcore y el rock alternativo.
Sobre la tarima, desfilaron bandas como Saves The Day, Saosin, State Champs, Pulley, Miss May I, The Early November y Joyce Manor. Por supuesto que todos nos estremecíamos al escucharlos tocar sus mejores éxitos e incluso grupos como The Wonder Years que nunca habían dado un show en México se mostraron muy contentos por el recibimiento que tuvieron de todxs sus fans.

Espacio de crecimiento y consolidación
Día Libre ha ofrecido un gran espacio para darle más posicionamiento a nuevas bandas como fue el caso de Somos Desastre que por primera vez se presentaban en un festival y Blnko.
Estas bandas emergentes están haciendo que el género continúe incluso en nuevas generaciones, quienes también tuvieron la oportunidad de estar entre el público y disfrutar y convivir con algunos de sus fans, así como Delux, Finde y Tungas quienes forman parte de las primeras bandas formadas en México con una gran trayectoria.

Lo que también emocionaba a muchos que estuvimos ahí, era voltear y encontrar a personas con playeras de otras bandas como New Found Glory, blink-182, NOFX e incluso del When We Were Young o el museo del Punk.
Ahí me daba cuenta que sí, definitivamente todxs crecimos escuchando las mismas bandas y claro que tampoco podían faltar los Vans o New Balance (aunque ya les pongamos plantillas). Todo un estandarte de una cultura.

Día Libre 2025: expectativas superadas
Creo que todos los fanáticos del género esperamos que a esta nueva propuesta de festival se vayan sumando más patrocinios para que crezca más, ya que en cuestión de las bandas superó las expectativas muchísimo más allá de lo que habríamos imaginado.
¿Que necesitaría Monterrey para que este festival tenga más posicionamiento? ¿O será que estos géneros solo se quedaron para formar parte de un solo nicho y una generación?
Creo que mientras continúen con todos esos géneros entre bandas ‘viejitas’ tanto como con las más actuales, seguirá teniendo un gran recibimiento entre los verdaderos fans.
Texto por Pahola Fentanes (@pahola_fentanes).
Fotos por Diego Arregui (@queputonombre).
