Pensar en el concepto que tuvo este concierto, al principio, me resultó difícil, pues hay un sinfín de conciertos en la ciudad, pero algo tenía que hacer diferente o especial a esa noche que fue más allá de una alfombra roja, paparazzis, performance y hits.
BUENAS NOCHES (2024) fue el regreso de Quevedo al ojo mundial, pues después de tener una canción que sonó hasta por debajo de las piedras con Bizarrap, regresar a los escenarios sería todo un reto. Pero con la gira de este segundo álbum lo logró. Y encajó en una comunidad generacional.
La gran vía de Quevedo en Guadalajara
Antes de comenzar como tal a escribir sobre el concierto, quiero decir que soy de las personas que no se spoilea en redes sociales. No tenía mucho contexto de esta gira, no sabía qué esperar o hasta dónde poner la vara. Pero sin duda estoy segura de que fue mejor de lo que pensé.
Este concierto se caracterizó por ser toda una puesta en escena, con un despliegue visual y sonoro que le quedó como anillo al dedo al Auditorio TELMEX.
Ahora entremos a la parte de la alfombra roja. El escenario estaba completamente pensado para que todxs tuviéramos nuestros ojos en lo que realmente íbamos a ver: a Quevedo.
Pero de un momento a otro, esa alfombra roja se llenó de paparazzis, que posterior a eso se convirtieron en bailarines que le dieron otro tono a la noche. Y aunque las pantallas estaban en blanco y negro, el color de lo que estaba en escena se sentía en cada movimiento y expresión del performance al interpretar las canciones del canario.
De Canarias al mundo entero
Esa noche en Guadalajara no solo fue un recorrido por BUENAS NOCHES (2024), sino que, con utilería y elementos escenográficos, Quevedo nos trajo desde ese verano inolvidable hasta una cantina que claramente encajaba en la narrativa de las canciones más emotivas del artista.
En varias canciones, el público tomaba tanto protagonismo que en ciertos momentos Quevedo quedaba en segundo plano. La euforia se sentía a flor de piel y las luces, perfectamente sincronizadas aportaban una atmósfera única. Era como si BUENAS NOCHES (2024) cobrara vida en el escenario y nos envolviera en su energía.
Fotos de María Fernanda Balderas (@half.empty.girl)
