Quiero comenzar este texto mencionando mi acercamiento al género, pues relativamente estos corridos tumbados, así bautizados por Natanael Cano y posteriormente popularizados por Peso Pluma, comenzaron a ser más sonaditos entre los de mi edad.
Pero de un día para otro, el mundo entero estaba cantando esas letras tan famosas que invadían TikTok, cuando, de repente, un nuevo nombre comenzó a resonar, Tito Double P.
Cabe aclarar que este nombre no ganó notoriedad por ser primo de Peso Pluma. Su parentesco no fue lo que lo llevó hasta donde está: fue el recibimiento de sus primeras canciones lo que, hasta la fecha, lo han colocado en los primeros lugares de múltiples listas de reproducción.
Creo que, al ser conscientes del impacto que generó en su cultura, era de esperarse una gira con sold out, pues el recibimiento ya estaba asegurado por los números que respaldan su popularidad.
Al anunciarse en el show de Tito Double P en Guadalajara, y en un recinto medianamente grande como lo es el Auditorio TELMEX, se esperaba un show del mismo nivel, con esas colaboraciones que tanto han sonado en las calles.
Otra borrachera más
El inicio de este año trajo consigo grandes expectativas en los conciertos y festivales. Muchxs tendrían de propósito asistir a los más posibles para llenarse de nuevas experiencias y futuras historias para compartir en Instagram.
Al llegarse el día del concierto, con el temor del clima cambiante, lo único que se agradecía era que fuera sábado, pues el horario de salida no iba a ser problema. Y vaya que se extendió bastantito, pues el show dio inicio a las 22:30.
Con un panorama completamente oscuro y un silencio que pronto sería remplazado por la euforia, la pantalla principal llamó la atención de lxs asistentes. En ella una pequeña muestra audiovisual de lo que estaríamos a punto de vivir en carne propia. Los celulares de todxs estaban en lo más alto tratando de capturar todo desde el minuto uno.
Poco después de que nuevamente la oscuridad inundara el lugar, varios instrumentos comenzaron a salir al escenario, y en medio de él el corazón del género comenzó a sonar, esas notas de guitarra dieron inicio a más de dos horas de show.
Bélico… pero no tanto
En cada canción había un fragmento que se destacaba y sonaba muchísimo más fuerte, seguramente era por los trends que ya teníamos bien identificados. Pero más tarde regreso a esto.
Para que este concierto de Tito Double P en Guadalajara estuviera completo, obviamente tenía que sacar su balero y esas frases ya tan características, pues su “Ay mamá” enloquecía y le daba un toque más cálido al lugar, haciendo que todxs entraran en un personaje bélico, pero no tanto.
Los visuales iban a la par del ambiente, las luces de colores literalmente pintaron el escenario y le dieron dinamismo al show.
Plantando cara a las tendencias
En esta parte, y ya para cerrar, me gustaría entrar a la reflexión y tratar de reconocer la razón por la que estamos yendo a esos conciertos.
Puede ser que lo hagamos para cantar las partes que escuchamos en redes y de alguna manera capturarlas. O también está la opción donde verdaderamente estamos disfrutando todo lo que vivimos en el concierto; desde comprar el boleto, hasta elegir el outfit que usaremos en él.
Quizá sea momento de detenernos y preguntarnos qué es lo que estamos viviendo y dejar de darle scroll a los momentos que no son tan virales.