PARAÍSO: El primer headline show de Mora en Guadalajara

Texto por Erandi Luna (@eran_lunaa).
Fotos por Julio del Toro (@julio.deltoro).

El reggaetón le ha cedido voz a nuevxs artistas, ha cambiado a tal grado de sumar sonidos disímiles que seducen a aquellxs que actualmente escuchan este género, dándoles una identidad musical, misma que se vio en el concierto de Mora en tierras jaliscienses.

El puertorriqueño tiene una historia curiosa, pues pasó de producirle a Bad Bunny a abrirse puertas a su propia carrera. 

Es un artista relativamente nuevo, desde que experimentó por allá de 2021 a ser intérprete de su primer álbum, dio a conocer lo que quería transmitir con su música, teniendo una metamorfosis de sonido de la que hablaremos más adelante.

Dos años después lo estaríamos viendo por primera vez en nuestro país, con varios headline shows en distintas ciudades, una de ellas, la perla tapatía.

Todxs en un mismo espacio y tiempo

Recuerdo que desde que anunciaron el show, amigos lo compartían en sus redes sociales, pues se nos haría verlo en su primer tour y con la promoción de su más reciente álbum, PARAÍSO (2022). Cuando salió la venta de boletos, estos se agotaron en cuestión de minutos, acto que decía a gritos que sería un evento demandante. 

Llegó el día que muchxs estaban esperando, el Teatro Diana abría sus puertas para recibir dicho evento, lxs asistentes, en su mayoría jóvenes, llevaban outfits muy coloridos, donde destacaban los tenis y los lentes, el color dominante era el rosa, quiero pensar que se debe a las vibes del artista o a la moda que consumimos con el “nuevo” concepto de streetwear.

Faltaban minutos para empezar el concierto y la gente seguía ingresando, haciendo fila para tomar sus lugares y disfrutar la próxima hora y media. Todos se veían acompañados, grupos de más de tres tomándose fotos o hablando de lo emocionadxs que estaban, las vibras del lugar se unían y sacaban lo mejor de sí.

Una vez dentro del recinto se escuchaban los murmullos, nada en concreto, pero podía ver la cara de todxs y en sus facciones no se borraba la expresión de éxtasis. Las pantallas de los celulares brillaban y en ellas las historias que ya residían en las redes sociales, mismas de aquella noche en el paraíso, un momento para despejarse y asimilar lo que estarían a punto de vivir.

La sanación del reggaetón

A eso de las 21:15, la pantalla se tornó de blanco y con ella una distorsión de colores al ritmo de ‘BIENVENIDA AL PARAÍSO‘, sabíamos que Mora saldría en cualquier momento. Los gritos invadieron el Diana y los celulares estaban en alto, alertas para documentar cada canción del puertorriqueño.

Desde la primera canción el público vociferaba con sentimiento, letras que son tan adaptables para las situaciones que estamos viviendo y que hasta cierto punto nos hacen sentirnos identificadxs, gritarlas fue como un curita al corazón.

Las luces se apoderaron del lugar y con ellas el sonido de PARAÍSO (2022), álbum en el que se ve la experimentación de Gabriel. Tonos de EDM invadían nuestros oídos y la respuesta a ello era mover los pies y los brazos, en este punto el calorcito se hizo presente en el Teatro, las gotas de sudor caían lentamente, pero no era impedimento para seguir bailando y cantando.

Escuchar las canciones de este álbum a todo volumen me puso a pensar en la espera de todxs y cada uno de lxs asistentes, de la emoción y la pasión que se comparte por un artista o incluso por un género, mismo que antes era reprochado por bastantes y que hoy se refiere a eventos en sold out.

Un recorrido lleno de permutación 

El concierto se dividió en tres partes, la primera con la promoción del álbum homónimo, la segunda en un recorrido por MICRODOSIS (2022), disco que introdujo a la experimentación a Mora, con sonidos muy apegados a lo que es hoy. Las transiciones entre discos se disfrutaron visualmente, pues al dar inicio Mora salía del escenario y se escuchaba un pequeño sonido descriptivo del siguiente álbum, todo esto acompañado de visuales descriptivos del concepto de cada uno de ellos.

Canciones que se hicieron famosas en TikTok, y que por fin podríamos sentirlas cercanas destacaron en esta parte del show, los gritos cada vez eran más notorios, todxs alzaban su mano dándole un ángulo 0.5 a sus videos y enfocando su cara y la de sus amigxs al cantar sus canciones favoritas.

El concierto estaba llegando a su fin y las interacciones del puertorriqueño eran cada vez más escasas, el tiempo se estaba acabando y todavía faltaba darnos una probadita de su primer álbum, Primer Dia de Clases (2021), mismo que cuenta con colaboraciones de artistas ya conocidos.

Este álbum es muy diferente a los otros dos, pues el cantante todavía no definía el estilo que le quería dar a sus canciones, un álbum que sin necesidad de experimentación logró llegar a la escucha de muchxs. El disco sirve como carta de presentación de un artista que debería convertirse en protagonista de la escena en los próximos años, y cumpliendo su objetivo sabemos de qué va Mora.

Después de deleitar el concierto que habíamos vivido, con canciones que no precisamente entran en los álbumes mencionados, como ‘Una Vez’ con Bad Bunny y ‘Volando-Remix’ con Sech, los asistentes no querían irse sin antes cantar ‘Memorias‘, el artista cedió y le dio un buen cierre a la noche. En esta última canción todxs brincaron al ritmo de Mora y miles de papelitos blancos invadieron el recinto, el Diana estallaba con tonalidades claras y energía de satisfacción.

Al terminar el concierto tuve la fortuna de ser la primera en salir y al ver el Teatro totalmente lleno pude camparlo con los últimos eventos que se han presentado allí, el número de personas era superior, el reggaetón esta liderando los primeros lugares en consumo y esta industria musical se sostiene gracias a la producción y compra venta de productos como lo son los conciertos, mismos que promocionan a lxs artistas.

Una generación versátil en busca del cambio del género

Tomando este fenómeno en el que las nuevas generaciones que escuchan reggaetón buscan el cambio y la influencia en las letras y el ritmo, Mora llegó a cambiar el concepto con la mezcla de reggaetón con EDM, creando un sonido que verdaderamente suena diferente a lo que conocíamos como reggaetón. 

Un pilar en el nuevo consumo de música y no solo de este género, lo mismo está pasando con otros estilos que son mezclados y cambian el sonido “natural” sin miedo a sonar diferente.