Nothing en la CDMX, energía y sonidos envolventes

Texto por Jorge Olvera (@jorgeboge).
Fotos por Desireé Ramírez (@desyfree).

Recientemente tuvimos la oportunidad de asistir al regreso a la Ciudad de México de la banda llamada Nothing y fue una experiencia inolvidable. El evento tuvo lugar en las inmediaciones del Foro Indie Rocks! y la energía era absolutamente eléctrica desde el momento en que la banda subió al escenario.

Hipnótico y caótico

Desde el primer acorde, la música de Nothing llenó el espacio con un sonido poderoso y emocional abriendo con la canción ‘Say Less‘. Acto seguido, la banda sigue con ‘April Haha‘ dándonos las primeras instancias del disco The Great Dismal (2020).

Nothing nos ofreció una selección de canciones de su catálogo, desde las melodías más suaves hasta los riffs de guitarra más intensos, y cada una fue ejecutada con una pasión impresionante por parte de todos los miembros tales como Doyle Martin en guitarra, Christina Michelle en el bajo, Zachary Jones en las percusiones y Domenic Palermo en las voces junto con guitarras, todos ellos en un solo espacio y una mezcla continua de sonidos envolventes que nos transportaban a una inmensa pared de sonido como saben hacerlo. 

La sorpresa de la noche se la lleva el vocalista, Domenic Palermo, donde fue un verdadero maestro en el escenario. Su voz se elevó sobre el sonido de la música con una intensidad apasionada que hizo vibrar cada célula de nuestros cuerpos y no fue hasta escuchar las primeras notas de ‘Chloroform‘ donde Nothing nos impresionó a todos al escuchar una de las canciones menos tocadas en sus sets en vivo.

Cada uno de los integrantes entregó un espectáculo enérgico y dinámico que dejó al público totalmente impresionado, tanto la forma por la que se movían, las expresiones faciales que hacían y sobre todo, su gran pasión por el público.

Nostalgia ruidosa y difusa

Estamos seguros de que la conexión entre Nothing y ella audiencia de esa noche hizo que el concierto de fuera especial, desde el regreso a la Ciudad de México hasta las breves pausas y los pequeños gestos nobles que hizo Domenic ante el público y el agradecimiento que nos daba a todos en general.

La audiencia respondió con entusiasmo, cantando junto con cada canción y bailando con energía entre las canciones más movidas tales como fueron ‘Hymn to the Pillory‘ y ‘Vertigo Flowers‘. 

El regreso de Nothing a la «ciudad de concreto» fue una experiencia inolvidable que demostró la pasión y el talento de esta banda de shoegaze impresionante, donde nos demuestran que tienen su lugar dentro del género, pero especialmente dentro de nuestras memorias por el show tan resonante, surreal y de maravilla que ejecutaron.