15. Reseña de Once Twice Melody (2022) de Beach House

El timer del reproductor de música marca el segundo uno de la canción homónima del álbum, el primer esbozo de toda una colección de 18 canciones con las que puedes morir y revivir al mismo tiempo.

Aunque Beach House había comenzado a escribir el álbum antes del confinamiento, las circunstancias les dieron luz verde para perderse por completo en el proceso. Un álbum, en el que por primera vez Victoria Legrand y Alex Scally trabajaron en todas las áreas en la realización de una producción discográfica.

Con Once Twice Melody (2022), Beach House alcanzó el número 1 en varias listas de Billboard -del 18 al 24 de febrero-, incluidas las mejores ventas de álbumes, álbumes de vinilo, mejores álbumes alternativos, mejores álbumes de rock, álbumes de Tastemaker y mejores ventas de álbumes actuales.

Sueño lúcido

La grandeza de Once Twice Melody (2022) no radica en su inmensidad, extensión o duración, sino en la capacidad del dúo para crear música que posee la misma intimidad y poderosa vinculación con algún recuerdo guardado en el cajón olvidado de nuestras vidas, y al mismo tiempo, ese asombroso impulso de seguir soñando despierto. La capacidad de hacerte sentir en cada canción, estrofa, puente, verso, lo que quieras que sea, a través de ese espectro pastoral, es por lo más mágico.

Las texturas arrolladoras de la banda y los sintetizadores relajantes a menudo se han sentido como una vía de escape de todos los problemas de la vida. Las maniobras de escapismo de Beach House nos han representado en los momentos más confusos y desafiantes para todos nosotros, la naturaleza de la música lleva consigo la habilidad de  desconectarnos de esas sombrías realidades del mundo

El dúo de Baltimore no solo es escapismo, porque por sí sola puede ser engañosa, habiendo de alguna forma una connotación de que no estás lidiando con la realidad. Son esos momentos en los que la fantasía es la mejor forma de enfrentarse a la realidad y quizá la forma más responsable.

Las letras ambiguamente imaginativas de Legrand se han vuelto más grandiosas y entrañables. La esencia de su sonido sigue siendo la misma, los ejes centrales siguen ahí, pero ahora todo se siente más reluciente: Su embarcación de madera con manchas de aceite se transformó a una nave espacial maravillosa y aerodinámica; funcionando fundamentalmente con ráfagas de vibraciones puras, efímeras y envolventes.

¿Once Twice Melody es la afirmación que lxs músicxs tienen polvo de estrellas en su ser?

Narrativas entrecruzadas de amor y soledad, intimidad y abandono, madurez y nostalgia. Cualquiera de estos temas son lo suficientemente ricos como para alimentar mucho más que los ochenta minutos de Once Twice Melody (2022).

Es la fantasía más salvaje de la banda hasta el momento. Un álbum doble de 18 temas estructurados en cuatro capítulos que te ofrecen la oportunidad de perderte en toda su magia y maravilla, cada canción tuvo su momento de protagonismo, una estrategia que es por demás ambiciosa sino noble al mismo tiempo, ya que reconoce cada pieza del rompecabezas con la propiedad debida de una obra de arte.

Hay cosas que suceden todos los días, que tienen un efecto profundo en ti y en lo que haces, en todas tus interacciones con las personas y en lo que produces como ser humano.

Al final es eso lo que nos hace diferentes, la humanidad, algo que caóticamente e irónicamente hemos perdido con el abrumador paso del tiempo, pero es a través del arte que recuperamos nuestro espíritu y esencia más implícita, donde la humanidad encuentra un refugio y Beach House es esa cobija que nos cubre.

Son maestros en crear imágenes vívidas, imágenes a través de sonidos. Beach House a través de su música y la oniria de sus canciones actúan como aquellas manchas de tinta, de cosas que se sintieron pero no se dijeron, cosas que se pensaron pero no se realizaron, es lo que nunca fue y al mismo tiempo lo que siempre fue, ensoñación y realidad reconfortante, liberadora, inquietante e impresionantes lechos de sonido para proyectar propias emociones. El dúo anima a través de su peculiar nostalgia a que los oyentes dibujen sus propias asociaciones.

Como lo mencionamos antes, para Once Twice Melody (2022), la banda tuvo una autonomía casi completa, asumiendo ellos mismos las tareas de producción y trabajando en gran medida desde su propio espacio de estudio.

Libertad que al mismo tiempo generó sus propios desafíos y complejidades, lo que a su vez, redimensionando a grandes escalas las capacidades creativas y artísticas de Beach House.

Dentro del mar desbordante de sentimientos de Once Twice Melody, lo llamativo es que aun así nos encontramos deseando algo más, en presencias etéreas, lagrimales a punto de estallar, y nudos en la garganta, con éxtasis que nos llevan a flor de piel como ‘Modern Love Stories‘, ‘Superstar‘, ‘Over and Over‘, ‘Ilusion Of Forever‘, ‘Hurts to Love‘, sería injusto no mencionar alguna. Evocan un estado de ánimo panorámico y contemplativo, pero a la vez tan real y vivido.

Observadores de estrellas

En tiempos de incertidumbre, para los jóvenes de esta generación a lo único que nos podemos aferrar es a lo que hacemos cada día, con la esperanza de sobrevivir al final del camino con la satisfacción de haberlo intentado.

Once, Twice, Melody, fragmentado así podría ser una alusión a la relatividad del tiempo o a la naturaleza efímera de cada momento, sensaciones que pueden ser compartidas y vividas, una, dos, tres, pocas o muchas veces, cuanto más escuches este álbum, más acompañado te sentirás.

Cuando se trata de música, tendemos a creer que la reinvención es la base del genio artístico. Eso fue cierto para David Bowie, por poner un ejemplo, y a menudo se ha convertido en una realidad para los artistas de hoy: La innovación incesante es un requisito implícito para sobrevivir en tiempos donde se valora tanto la novedad. Así que Beach House, en un periodo de 15 años y 08 álbumes en su haber han hecho que cada uno de ellos tenga su sello de excelencia por derecho propio.

Tonterías dulces que se impregnan en nuestro imaginario colectivo, con estrellas reflejándose en nuestros ojos, la luna iluminando nuestro camino oscuro, los cisnes de un lago, el resplandor de una puesta de sol, una super estrella brillando a lo lejos, el deseo de vivir después de todas las fiestas, esas noches a tu lado, son esos aleluyas sublimes que nos hacen sumergirnos en el simple placer de perdernos en la música.

Beach House, es incapaz de crear algo malo. Un par de observadores de estrellas de Baltimore que nunca han sido tímidos a la hora de cortejar al infinito. Uno no escucha Once Twice Melody (2022), se disuelve en él como pastilla efervescente.